Una bucólica fotografía de libro de familia de las que tantos recuerdos nos traen a todos. Se trata nada más y nada menos que de la familia de tío Crecente Alcón y de tía Eustaquia Domínguez con los cinco retoños que consiguieron sacar adelante. Dos hijas se quedaron en el camino, Herlesbinda, la primera, que con unos 8 meses se nos fue sin motivo aparente y Clotilde, la segunda, que ocurrió lo propio cuando no contaba con un año de edad. Ninguna de estas dos criaturas aparece en la instantánea de arriba por motivos obvios. Abajo a la izquierda tenemos a tia Eustaquia (¿quién no se acuerda de ella?) y encima de ella tenemos a Julián. Hay dos niñas en medio, la de arriba es Binda (Herlesbinda, en recuerdo de la hermana que había fallecido antes de nacer ella) y la de abajo es María (Mari, la de Poli). El niño de arriba a la derecha es Crecente (que sigue teniendo la misma cara) que se llama igual que su padre (debajo). La niña de la derecha es Gregoria (Goya) que es la que nos ha dejado la fotografía, aunque con unos años más. Preciosa instantánea de 1941.